Pregunta: En las empresas hay cierto miedo a preguntar al cliente. Cada vez se pregunta menos y en menos profundidad a los clientes por los productos o servicios que venden las empresas. Vence el miedo y ¡pregunta a tus clientes qué piensan de ti! Solo así podrás detectar áreas de mejora
Sé constante: Muchas empresas son conscientes de la importancia de pedir a los clientes su opinión sobre los servicios, pero únicamente lo hacen de manera puntual, en encuestas anuales o semestrales. Esto es un error. Si quieres conocer lo que piensan tus clientes debes preguntarle cuando se produce la acción de compra. Define el customer journey y evalúa casa uno de los pasos del recorrido de forma sistémica. Solo así identificaras cuál es la verdadera experiencia de compra de tus clientes
Crea información accionable: no solo hay que preguntar también hay que actuar. Los datos obtenidos hay que procesarlos y convertirlos en información valiosa para la empresa
Involucra a toda la empresa: comunica la información que hayas recogido a tus empleados porque si los clientes dan su opinión y los trabajadores que les atienden no saben lo que quieren, el trabajo no sirve de nada. La información debe llegar a los empleados porque está en sus manos la gestión diaria de la compañía
Genera una cultura de escucha y acción: La empresa debe mostrar a todos los empleados que el cliente está en el foco, así como transmitir los valores y pautas que definirían la relación con los mismos
El tiempo es oro: hay que elegir el momento adecuado. Si alguien tiene un problema con nuestra compañía y esperamos en año en llamarte, su respuesta será distinta que si llamamos en el momento que ha sufrido el percance