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El cliente misterioso, la táctica del comercio para conocer el rendimiento de sus trabajadores

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Una de las campañas más importantes para los comercios, tras la de Navidad, es la de las rebajas de enero. Esta campaña está marcada por la gran afluencia de público y el movimiento constante de productos, tanto en compras como en devoluciones.

Esta situación pone a prueba a las plantillas, en ocasiones reforzadas por nuevos trabajadores sin experiencia, y que a veces no está preparada para mantener el alto rendimiento exigido.

Para descubrir si el empresario cuenta con el personal adecuado para enfrentarse a dichos retos y optimizar los beneficios del negocio, muchos recurren a la labor de los detectives privados. «La labor del detective privado especializado puede resultar clave para garantizar al responsable de cualquier negocio que cuenta con los mejores profesionales de atención al cliente», explica Ángela Martí, responsable de Detectives Global Risk.

Cliente misterioso

Introducir un detective haciendo labores de cliente misterioso (Mistery shopper en inglés) en un negocio permite evaluar de manera profesional el papel que juegan los vendedores, tanto en su relación con el cliente como en su dominio del producto. Ofrecen un informe fiable sobre sus actuaciones en el ejercicio de sus actividades habituales.

«Las épocas de rebajas son cuando recibimos más solicitudes de empresarios para que destinemos a clientes misteriosos a sus tiendas», explioca Martí, que entiende que en esas fechas las empresas se juegan buena parte de los ingresos de la temporada. «Hay clientes que dejan de comprar porque el género está descolocado, dalando la imagen de la empresa, o porque los empleados olvidan su cordialidad cuando el establecimiento está lleno», advierte Martí.

Fuente: El Economista 

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